Morir en el Estado de México
Ángel Serrano Gálvez
El Universal
El INEGI, como cada año, hizo públicos los datos sobre defunciones registradas, información que se construye a partir de los registros de hospitales, forenses, registro civil y demás instituciones, que permite dar cuenta de la mortalidad registrada durante el año previo a la publicación de la información. Es decir, cuántos, dónde y de qué forma perdieron la vida durante 2019.
Una de las características de esta información es que ésta no se construye en función de un catálogo jurídico, sino a partir de lo estipulado en la Clasificación Internacional de enfermedades en su décima versión (CIE-10). Ello permite visualizar y dimensionar la mortalidad en el país desde una perspectiva de salud pública, pero también, permite dar cuenta de la violencia vivida en el país.
No es sorpresa para nadie que la mayor cantidad de defunciones por agresión estén relacionadas con armas de fuego, situación que se vive en el Estado de México y que se replica en todo el país y que está presente tanto en mujeres como en hombres, y mientras que no se implementen estrategias en todos los niveles para reducir la presencia de armas de fuego en las calles esto será algo que se repetirá año con año. Leer más.